La nata casera proporciona a las galletas un sabor intenso
Para conseguir hacer unas galletas de nata tradicionales, el secreto está en su ingrediente principal. Si quieres unas galletas con el sabor de las de antes lo mejor es utilizar nata casera, ya que su textura y gusto será muy similar a la que utilizaban nuestras abuelas.
Hacer nata casera es más sencillo de lo que parece. Sólo necesitas leche cruda de vaca. Hay varias marcas que la comercializan y puedes encontrarla en tiendas ecológicas, establecimientos especilizados o tiendas gourmet.
El procedimiento para obtener la nata casera es hervir la leche cruda y dejarla enfriar. A continuación se le retira la capa gruesa de nata que se habrá formdo en la superficie. Podemos hervir la leche varias veces hasta obtener la cantidad de nata que queramos. Con 2 litros de leche cruda se obtienen aproximadamente 135 gr de nata casera.
Para elaborar las galletas, si hemos obtenido 135 gr de nata casera, necesitaremos además 135 gr de azúcar y 135 gr de harina. Mezclamos el azúcar con la nata y añadimos la harina poco a poco hasta obtener una masa sin grumos. Introducimos la masa en una manga pastelera y hacemos pequeños montoncitos sobre la placa de hornear, dejando separación entre ellas ya que crecen en el horno. Horneamos a 180ºC unos minutos, hasta que los bordes empiecen a dorarse. Al sacarlas estarán algo blandas pero al enfriar endurecen quedando con un perfecto punto crujiente; ni demasiado duras ni demasiado blandas.